100% actitud: Las 10 mejores entradas de un personaje a una película

Con la capacidad de ver lo que nos plazca, a la hora que nos de la gana, ahora las escenas de apertura de cualquier gran película también son el preámbulo de lo que nos espera: llegar hasta el final o hacer 'NEXT' en los primeros 3 minutos. Al igual que cualquier video en redes, esos pocos segundos iniciales tienen que ser capaces de establecer su tono y su ritmo.

Lo mismo ocurre con los personajes que pretenden convertirse en iconos. Mucho de su éxito depende de su entrada en escena. Claro, hay muchos que te cautivan a lo largo ed la película y otros que te sorprenden con un giro sorpresivo de actitud. Pero eso podría deberse más al guión que a la propia actitud del personaje.

Solo algunos elegidos tienen el don de quedar impregnados en nuestras retinas (y en nuestros corazones) con la primera secuencia visual con el rimer diálogo. Aquí una lista de las diez que lo lograron sin un orden en particular...

10. El Guasón - El Caballero Oscuro (2008)

Director: Christopher Nolan

El atraco al banco en caliente es emocionante e inmediatamente icónico, con todos los ladrones usando esas espeluznantes máscaras de payaso. Fuera del edificio, un hombre de espaldas al público es recogido en un automóvil.

Ha sido él quien ha planeado este atraco y los ladrones tienen la intención de sacarlo de las ganancias por completo. Las tomas capturan las diferentes partes del banco mientras los criminales entran, y uno por uno, vemos como se matan unos con otros.

Mientras tanto, una acción marca la tensión. Durante el explosivo tiroteo final entre el gerente del banco y el payaso restante, el criminal se lleva el premio. En un escalofriante monólogo, le asegura al gerente ya neutralizado que "lo que no te mata, sólo te hace más fuerte". El ladrón se quita la máscara, revelándose como el Guasón.

9. Sargento Hartman – Nacido para Matar (1987)

Director: Stanley Kubrick

En una barraca de un cuartel militar, los reclutas se paran de frente en una fila perfecta frente a sus literas, mientras su instructor de instrucción, el sargento de artillería Hartman, camina por la línea y los introduce a la vida en los Marines.

Hartman ordena que los hombres sólo hablen cuando se les dirija, y usa "señor" como saludo formal para empezar y terminar todas las declaraciones. Explica que el objetivo del entrenamiento básico es transformar a cada marine en un "arma" y un "ministro de la muerte".

Hasta entonces, sin embargo, les dice a los aspirantes que son "vómitos" infrahumanos. Dice que su trabajo no es discriminar, sino eliminar a los “pendejos". Les coloca apodos a casi todos, mientras se desplaza frente a ellos.

8. Sherif Ali - Lawrence de Arabia (1962):

Director: David Lean (Inglaterra)

El director Brian de Palma considera esta presentación de personaje de la historia del cine como la mejor de toda la historia del cine: El desierto. A lo lejos se ve un pequeño borrón. El borrón se convierte en una pequeña mancha negra. Parece ser un espejismo. Pero la mancha se mueve y se hace mayor.

Es un hombre a caballo. Es Sherif Ali, un noble del clan de los Harish, quien mata al guía, ante la sorpresa de Lawrence, por beber de su pozo sin autorización.

7. Don Vito Corleone - El Padrino (1972):

Director: Francis Ford Coppola

"Creo en América". Esta es la línea, hablada desde una pantalla negra, que comienza lo que es quizás la mejor película americana jamás hecha. Y la escena en la que esto nos lleva nos presenta a uno de los más grandes personajes jamás filmados: Vito Corleone (Marlon Brando): El Padrino.

Don Vito es sublime en este papel. Mientras la cámara se aleja lentamente de un hombre que le ruega que haga justicia a los hombres que hirieron a su hija, vemos al más dócil escuchando, pacientemente. La cámara corta su reacción, y se nos da el primer vistazo al Padrino.

6. Oskar Schindler - La lista de Schindler (1993):

Director: Steven Spielberg

Oskar Schindler aparece en una habitación de hotel en Cracovia. Su cara no se muestra, y la atención se centra una cuidadosa selección de su outfit. Se pone su costoso reloj, gemelos, y el pin del Partido Nazi, y toma un gran fajo de billetes de su mesa de noche.

Se dirige a un club nocturno. Entra solo... se sienta solo, nadie lo conoce. Al final de la noche, con su encanto y carisma natural, cautiva a toda la habitación, todos incluyendo las bailarinas y los oficiales nazis, quieren una foto con él.

5. Jesús Quintana - El gran Lebowski (1998)

Directores: Ethan y Joel Coen

En solo tres minutos se presentó un personaje, al final intrascendente en la historia, del que no se sabrá su destino, con poco dialogo y sin embargo es difícil imaginarse esta película sin él.

Es el personaje que mejor presentación tiene en este filme definitivamente es Jesús, el ridículo y molesto jugador de bowling y el rival acérrimo del protagonista y sus amigos.

La secuencia es abiertamente absurda y exagerada y es eso precisamente, lo que la hace tan divertida y efectiva. Dos minutos de ver a Jesús lamiendo su bola de boliche y realizando todo un ritual antes de lanzar, son suficientes para contar con imágenes todo lo que hay que decir del personaje.

4. Trinity – The Matrix (1999)

Directoras: Lilly y Lana Wachowski

Vemos como un escuadrón de policía irrumpe en la puerta de un edificio abandonado para encontrar a Trinity sentada en un escritorio.

Afuera, el agente Smith llega para darle al sargento de policía una mala noticia: sus hombres ya están muertos. Dentro, somos testigos de una de las escenas de lucha más emocionantes jamás filmadas.

Trinity se eleva por la habitación, desafiando la gravedad mientras rompe brazos, apunta con las pistolas, y generalmente patea traseros. Esta presentación de personaje cambió el cine de acción tal y como lo conocemos hoy en día.

3. Capitán Jack Sparrow – Piratas del Caribe

Directores: Gore Verbinski, Rob Marshall, Joachim Rønning y Espen Sandberg

Con esta presentación se consiguió que supiéramos exactamente y en un minuto la personalidad de este señor. Este pirata borracho y loco entra en escena subido en la punta de un mástil, a bordo de lo que de acuerdo con el plano, es un imponente barco.

La cámara abre la toma para revelar que en realidad se trata de un pequeño bote al que le tiene sacar el agua sin parar. La espectacular secuencia concluye con Sparrow poniendo el pie sobre el muelle, cuando justamente su navío termina de hundirse en el mar, presentando de manera magistral al personaje.

2. Quint – Tiburón (1975)

Director: Steven Spielberg

Todo comienza con un raspado de uñas en una pizarra. Así es como Quint se presenta ante nosotros en Tiburón, y como llega a ser una de las mejores presentaciones de personajes de la historia del cine.

Mientras los personajes del pueblo discuten sobre qué hacer con el tiburón asesino en su pueblo turístico de la playa, son ahogados por el insoportable chillido de las uñas en una pizarra.

"Todos me conocen", dice Quint, mientras la cámara de Spielberg tranquilamente se abre paso entre la multitud para aterrizar sobre él. La gente del pueblo puede conocer a Quint, el público lo conoce gracias a esta escena.

Ese chirrido y ese discurso llamaron no solo la atención de los habitantes de Amity, sino también de todos los espectadores, aportando a la historia del cine, uno de los pescadores más geniales que jamás hayamos conocido.

1. Jep Gambardella - La gran belleza (2013)

Director: Paolo Sorrentino

Muy pronto, Sorrentino nos sumerge en una discoteca bacanal, cada una de las bailarinas girando en un cono de grotesco autoerotismo ensimismado, representando con varios grados de éxito y ridículo su noción de sexy-cool.

Se hace un llamado a La Colita, un baile en línea en el que los participantes siguen regresando al mismo lugar-emblemático, descubriremos, de la existencia de esta privilegiada multitud.

De la escena masiva, en un primer plano, gira hacia la toma, un hombre sonriente, exuberante y bien vestido que, según nos dicen, está cumpliendo 65 años. "¡Jep! ¡Jep!" Las mujeres lo saludan y besan, de lado a lado. Es Jep Gambardella.

Parece esencial para su diversión, su líder, aunque no pasa mucho tiempo antes de que le veamos retirarse, con un humor más melancólico y contemplativo, a su propio búnker, un apartamento de soltero con una terraza envidiable, con vistas al Coliseo.

Bonus: La naranja mecánica (1975)

Director: Stanley Kubrik

La película nos sitúa en Gran Bretaña, en un futuro indeterminado. Alex (Malcolm McDowell), un tipo muy agresivo tiene dos pasiones: La violencia desaforada y Beethoven. Y eso nos queda claro en la primera escena de la película, en la que él es se lleva toda la atención.

Alex comanda una pandilla llamada "Los Drugos", que dan rienda suelta a sus instintos más salvajes apaleando, violando y aterrorizando a su ciudad. Cuando esa escalada de terror llega hasta el asesinato, Alex es detenido y enviado a la cárcel. Por decisión propia se someterá a una innovadora experiencia de reeducación con el objetivo de anular drásticamente cualquier atisbo de conducta antisocial. Pero árbol que nace torcido...